El Globo de Oro a Argentina, 1985 y por qué puede ganar el Oscar
El premio nada sorpresivo de la Asociación de la Prensa Extranjera al filme argentino abre la puerta a que el país se lleve un tercer Oscar. Cómo funciona el sistema y por qué no es disparatado pensar en otro festejo.
El argentino de a pie quizás sienta alegría por el premio Globo de Oro a la mejor película internacional -no hablada en inglés- para Argentina, 1985, el filme de Santiago Mitre producido por Primer Video (ergo, Amazon) que se convirtió en el más visto nacional en la temporada pasada. Polémicas políticas aparte -algo que contribuyó a su difusión- lo que viene es el Oscar, premio para el cual la película entró en la "lista corta". Para el buscador de coincidencias (sí, el mismo año ganaron Maradona la Copa del Mundo y La historia oficial el primer Oscar argento), van datos. Y un poco de análisis.
Primero: no siempre la película ganadora del Oscar es la misma que la ganadora del Globo de Oro. En la última década, no hubo coincidencia en 2015 (Globo de Oro, Leviatán; Oscar, Ida); 2017 (Globo de Oro, Elle; Oscar, El vendedor); y 2018 (Globo de Oro, En la sombra; Oscar, Una mujer fantástica). Curiosidad: las dos últimas argentinas nominadas al Oscar (El secreto de sus ojos y Relatos salvajes) no tuvieron siquiera nominación al Globo de Oro.
Los mecanismos de selección del Globo de Oro son más bien opacos y dependen del consenso de una centena de personas. El Oscar requiere que un miembro quiera votar la categoría "Lengua no inglesa" y se le obliga a ver once películas específicas. Puede ver más y luego hacer una lista de diez títulos. Lo importante, entonces, es que la película se vea. Una vez que queda la "lista corta" hoy de quince títulos, son centrales las relaciones públicas para lograr que el filme deseado sea visto. Si se logra, es más que probable que sea nominado.
Y una vez nominado, queda otro lobby -nada ilegal, aclaremos: es el tipo de campaña publicitaria común en todos los niveles del Oscar, e incluso tiene sus propias reglas- para que el filme se haga conocido entre los votantes definitivos. Suman dos cosas: que la película sea comprensible para el público estadounidense y que tenga potencial comercial. Argentina... tiene ambas cosas, además de una buena representación que el Globo de Oro multiplica. Su triunfo en los Oscar no sería una sorpresa, mucho menos en estas circunstancias.