La segunda sesión de resultados del año ha comenzado tras el cierre de junio y ya son más de 300 las empresas pertenecientes al S&P 500 que han publicado sus números. Entre ellas, las conocidas bajo el acrónimo MAMAA: Microsoft, Apple, Meta Platforms, Alphabet y Amazon. Adentrémonos en sus presentaciones para ver cómo les ha ido a estas empresas tecnológicas que conforman el Nasdaq, en lo que fue uno de los peores períodos para el índice.

Comenzando por Microsoft, la empresa presentó su último trimestre del ejercicio fiscal 2022. El resultado del mismo quedó por debajo de lo esperado por el mercado. Si bien las ganancias por acción crecieron un +3% interanualmente, cerrando en USD2,23, el consenso se hallaba en los USD2,28. Tampoco las ventas, que crecieron en sus tres segmentos principales, lograron alcanzar las expectativas. A pesar de haber incrementado +12% en conjunto respecto al mismo trimestre del año anterior hacia los USD51.826M, le faltaron USD605M para darle la razón a los analistas. Aun así, la empresa dio unas perspectivas optimistas de cara al resto del año y su ejercicio fiscal 2023, por lo que, en lugar de ajustar hacia la baja, las acciones de MSFT treparon un +3,4% el 27 de julio.

Por el lado de Apple, la historia fue diferente para su tercer trimestre de su ejercicio fiscal. Los pronósticos veían caídas mayores a las que se dieron en la realidad. Terminó dando una sorpresa positiva del +5,26% luego de mostrar ganancias por acción de USD1,20, cuando se esperaban USD1,14, a pesar de que esto representaba una caída interanual de -8%. Por otro lado, las ventas crecieron +2% hacia USD82.860M, y superaron levemente al consenso de USD82.810M. El iPhone fue el gran protagonista del avance, significando el 49% de los ingresos y creciendo un +2,8% comparado al mismo trimestre del año anterior. Así compensó la caída en ventas de la Mac, iPads y otros productos como AirPods, Apple Watch y Apple TV, entre otros. Aunque las perspectivas a futuro no fueron tan claras, Apple tras su presentación logró sumar +1,6% en la rueda posterior a su presentación.

Por el lado de Apple, la historia fue diferente para su tercer trimestre de su ejercicio fiscal. Los pronósticos veían caídas mayores a las que se dieron en la realidad. Terminó dando una sorpresa positiva del +5,26% luego de mostrar ganancias por acción de USD1,20, cuando se esperaban USD1,14, a pesar de que esto representaba una caída interanual de -8%. Por otro lado, las ventas crecieron +2% hacia USD82.860M, y superaron levemente al consenso de USD82.810M. El iPhone fue el gran protagonista del avance, significando el 49% de los ingresos y creciendo un +2,8% comparado al mismo trimestre del año anterior. Así compensó la caída en ventas de la Mac, iPads y otros productos como AirPods, Apple Watch y Apple TV, entre otros. Aunque las perspectivas a futuro no fueron tan claras, Apple tras su presentación logró sumar +1,6% en la rueda posterior a su presentación.

Lo que se observó en Alphabet para el segundo trimestre de su ejercicio fiscal fue una sorpresa negativa de -4,72% luego de que informaran ganancias por acción de USD1,21 en comparación a los USD1,27 consensuados. El decrecimiento en este valo significó una caída de -11% comparando los mismos trimestres año a año. Contra todo pronóstico, las acciones de la compañía llegaron a trepar un +4,3%, posiblemente impulsadas por el crecimiento en ventas que se halló en el orden del +13% superando el consenso de USD69.620M por USD65M. Es posible también que la disparada tuviera su explicación en el temor de los analistas por ventas de anuncios más bajos que los comunicados, sobre todo tras los reportes de peers como Snap.

Por último, Amazon comenzó el día 29 de julio alrededor de los USD135 por acción, luego de haber cerrado el día anterior en USD122 y presentar los resultados de su segundo trimestre esa misma tarde. No caben dudas que los resultados presentados dejaron más que conformes a los inversionistas, aunque resulta extraño tras haber mostrado una pérdida neta en el trimestre de USD2.028M, cuando el año pasado había logrado una ganancia de USD7.778M en el mismo trimestre. De todas formas hay que tener en cuenta que en el período se incluyó una pérdida por la inversión en Rivian de USD3.900M. Sin la misma, las ganancias por acción hubieran sido de USD0,18 en comparación a los USD0,15 esperados. Al salto discreto de la acción también lo explicaron el crecimiento en ventas, que superaron consenso del mercado y el propio guidance de AMZN, en conjunto con una visión más esperanzadora para el tercer trimestre.

Concluyendo, se puede observar que las expectativas creadas alrededor del trimestre terminaron impactando positivamente en la presentación de resultados. La incertidumbre y el miedo rondando las actividades de estas empresas, llevaron a que no tan malas noticias, se conviertan en buenas noticias. De cualquier forma, el futuro es incierto y debemos estar atentos a los números que vaya mostrando la principal economía mundial en el tercer trimestre del año y las políticas que se tomen en consecuencia. Estados Unidos técnicamente se encuentra en recesión al haber devuelto dos trimestres consecutivos de contracción, mientras que la inflación no cede y Jerome Powell ya no se muestra en su posición inamovible con respecto a la lucha contra la misma. Una profundización de las políticas actuales podría derivar en una recesión real, impactando en los ingresos y valuaciones de estas big techs, mientras que un pivoteo hacia una visión menos contractiva o incluso dovish por parte de la Fed, aun cuando ello pueda significar una pérdida de credibilidad total en la entidad monetaria y su lucha contra la suba de precios, podría ser un disparador donde estos papeles serían los primeros en beneficiarse.

*Analista de PPI