Por qué no sería una locura que el Oscar lo ganara Top Gun Maverick
Es probable que, después de años de películas independientes y de que recién hoy las salas de cine comiencen a comportarse como antes de la pandemia, el premio mayor de Hollywood vaya a las manos de Tom Cruise. Veamos por qué Top Gun puede ganar el Oscar.
Esta nota es subjetiva pero ecuánime: se basa en pensar las posibilidades de las películas y no en el gusto de quien escribe. La pregunta de Hollywood estos días -y la de la industria, que es transnacional- es "¿Qué película ganará el Oscar?". No es poco pertinente: como siempre, los premios implican una especie de diagnóstico, y marca más o menos qué filmes van a hacerse cada año, o cómo será la cosecha que viene. Cosecha de películas, pero también de público.
Veamos: la película más nominada (once menciones) es Todo en todas partes al mismo tiempo. Es independiente, es una fantasía, tiene una estrella de acción (Michelle Yeoh) en un papel diferente, ganó muchos premios y es candidata seria. La vio bastante gente (no fue Avatar, pero tuvo gran repercusión) y es conocida. ¿Puede ganar? Sí. Pero.
Le siguen con diez Sin novedad en el frente y Los espíritus de la isla. La primera es Netflix (pudo meterse en los Oscar "grandes" con esta producción alemana, cuando fallaron Glass Onion y, sobre todo, la anémica Blonde). La cantidad de nominaciones la hacen la candidata de acero para el Oscar internacional (aunque, por razones que merecen otra nota, tiene más chances Argentina, 1985). Pero después de Parasite y un par de Oscar poco conocidos, es difícil que la Academia se incline por ella en el Oscar grande.
Los espíritus... tiene gran peso en el circuito de festivales, su autor Martin McDonagh se consagró con Tres anuncios por un crimen y Colin Farrell ganó en Venecia. Es un "quizás", pero más para premios de interpretación.
Después están las nominadas por su fuerza cinematográfica o su tema o su prestigio, nominaciones "testimoniales": Avatar-El camino del agua, el drama feminista Women Talking,
el biopic Elvis, la ganadora de Cannes El triángulo de la tristeza, y el drama Tár, cuyo mayor peso está en la performance de Cate Blanchett.
Hasta hace unas semanas, ganadora segura hasta que Michelle Yeoh empezó a subir en las apuestas. Como sea, Cate quiere ganar la tercera, pero es difícil que sea para la película en sí.
Quedan dos: Los Fabelman y Top Gun Maverick. Siete nominaciones para la primera (incluyendo una para Spielberg) y seis para la segunda. La primera, un fracaso de público y éxito de crítica (es genial la película); la segunda, en ambos campos. Los Fabelman podría ser un reconocimiento a Steven Spielberg, que hace un filme autobiográfico. Pero quizás eso implique que se lleve el premio a mejor director y solo eso (ya sucedió con Rescatando al Soldado Ryan, que perdió el Oscar principal con Shakespeare apasionado -!!!-).
Entonces, hablemos de Top Gun Maverick. En primer lugar, conquistó a la crítica y es mucho mejor que la primera. Mucho. Muchísimo. En segundo, es la película que resistió la desesperación de Paramount -y el resto de la industria- para ser estrenada en plataformas en plena pandemia. Tom Cruise apostó con mucho riesgo a las salas. Así que tercero: es la película -y es la estrella- que rompieron rápidamente la barrera de los 1000 millones y generaron un fenómeno cinematográfico que, por fin, llevó gente al cine sin ser superheroes. Es decir, llevó a un público de mayor edad (también) y no solo por nostalgia.
Si la industria no falla en su diagnóstico, Top Gun Maverick se llevará el Oscar, que será también testimonial: un abrazo a la película que rescató a las salas de la quiebra, y de la (¿única, última?) gran estrella que puede llevar público al cine global solo con su nombre. Si acertamos, no se olvide que lo leyó primero acá.