El BCRA ante una temporada de sequía de dólares
Ingresaron los últimos 74 millones de dólares del tipo de cambio diferencial para los sojeros. A partir de ahora, el BCRA tendrá el desafío de asistir al mercado con casi 1000 millones por mes y al final del primer trimestre, cumplir con la meta del FMI
Este martes ingresaron al mercado único y libre de cambios (MULC) los últimos 74 millones del dólar navidad, un remanente de las operaciones realizadas hasta el 31 de diciembre. El lunes, habían sido otros 10 millones. De esta manera, el BCRA logró comprar apenas 3 millones en la última jornada. Según sus propias previsiones, de aquí en adelante se esperan al menos dos meses donde la autoridad monetaria tendrá que asistir al mercado con al menos USD1000 millones por mes, con lo cual el primer trimestre luce complejo ante los menos ingresos que habrá por las exportaciones de trigo y una demanda de divisas para el turismo.
Los sojeros vendieron a lo largo de todo 2022 36,5 millones de toneladas, según el informe Monitor Agroindustrial que elabora la CIARA CEC. En función de este guarismo, y con una producción de 42 millones, todavía cuentan en silo bolsas con 5 millones de toneladas con las que podrían presionar para un dólar soja 3.
A partir del tipo de cambio diferencial para el sector sojero en su segunda edición se vendieron 4,5 millones de toneladas y durante el último mes del año ingresaron divisas por USD3700 millones, de las cuales 3100 correspondieron a las liquidaciones concretadas a 230 pesos.
En septiembre y diciembre, el sector aceleró ventas por 17 millones de toneladas, cuando en todo el año lo hicieron por 36 millones. En la campaña 2020-2021, las ventas totales de soja llegaron a los 42 millones, sin tipo de cambio diferencial aunque tampoco estaba vigente el acuerdo con el FMI.
Según la consultora PxQ, a partir de estas liquidaciones récord, sumado a los ingresos a último momento de recursos de organismos multilaterales de crédito y los casi 300 millones para las represas sobre el río Santa Cruz, la variación neta de reservas durante el año pasado fue de 5622 millones, es decir 622 millones por encima de lo recalculado por el FMI. Con lo cual deja al Gobierno y al BCRA en una mejor posición para sumar los 500 millones de compras netas que necesita para cumplir la meta del primer trimestre de 2023.
Pero no será una tarea sencilla. Según los cálculos de la propia autoridad monetaria, sin el dólar soja 2 se tendrían que haber vendido, como mínimo, 1000 millones por mes. Enero y febrero estarán signados por ese desafío, situación que se empezará a sentir este miércoles cuando ya no entre ningún dólar más de los sojeros. Para el BCRA, este escenario también será propenso para que aparezcan las presiones devaluatorias, que siempre están. “Es algo que se espera, no nos preocupan esas presiones por eso la relevancia de haber sumado reservas hasta fin de año”, habían analizado ante una consulta de BAE Negocios.
El puente hasta marzo suele llegar con los dólares generados por las exportaciones de trigo, pero este año la campaña pasó de las 22 millones de toneladas a las 15 millones (o un guarismo menor según la Bolsa de Comercio de Rosario). También aparecen en el horizonte los problemas en la siembra del maíz y la soja como consecuencia de la sequía.
Para el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), la merma en las ventas del cereal representa 3000 millones de dólares menos de divisas. “La amenaza de la macroeconomía sigue siendo la disponibilidad de dólares. Varios factores complican este frente el año próximo. Todavía hay un escenario incierto sobre las campañas de soja y maíz pero seguramente el impacto total de la sequía esté entre los USD6000 y USD9000 para el 2023”, indicó el CESO en su informe “Balance de un 2022 desbalanceado”.
Las reservas internacionales finalizaron este martes en los 44.610 millones, apenas cuatro millones por encima del resultado del lunes.