Se vende el Castillo de Mandl de La Cumbre por casi 4 millones de dólares
Es una de las 127 propiedades argentinas que ofrece a la venta la famosa casa Christie's International Real Estate. Su último dueño, Fritz Mandl, fue el heredero de la mayor fábrica de municiones de Austria

Por Graciela Moreno
Salió a la venta uno de los símbolos de Punilla, en Córdoba. Entre las 127 propiedades argentinas que tiene para la venta la casa Christie’s International Real Estate figura el Castillo de Mandl, ubicado en La Cumbre. Un lugar lleno de increíbles historias construido en 1920.
Para el área de real estate de la famosa casa de subastas, es la propiedad argentina que tiene el mayor valor: cotiza a 3.800.000 dólares. En su aviso describe: “El Castillo Mandl, una casa llena de historia y arte de vivir”.
Fue construido por el médico Bartolomé Vasallo como residencia veraniega. Una mansión con tres plantas y 16 habitaciones que se ubica en una ladera a 1.200 metros sobre el nivel del mar en una superficie de 97.124 metros cuadrados, que tiene además cinco lotes. Conocido como El Fuerte o La Fortaleza en ese entonces, fue diseñado por el arquitecto Emilio Maisonnave a fines de la década de 1920. En 1942 lo donó a la Municipalidad que no lo aceptó por el alto costo de su mantenimiento.

Salió a la venta y lo compró Fritz Mandl, el heredero de la mayor fábrica de municiones de Austria. “Desde su fábrica de armas ayudó a pertrechar a la Alemania de Hitler, y la primera de sus cinco esposas fue una actriz vienesa que filmó el primer desnudo total de la historia del cine. Una pelea personal con el ministro nazi Hermann Göring acabó con la expropiación de sus bienes en Europa, y a mediados de los años ’40 llegó como refugiado a la Argentina con su Rolls Royce, una corte de mantenidos y una tonelada de oro en lingotes”, contó la publicación Arkiplus.

“Mandl llevó a cabo una remodelación plena de modernismo para la época. Sus interiores tienen el inconfundible sello del diseñador francés Jean Michel Frank, cultor del minimalismo en el siglo XX, de Diego Giacometti y mobiliario de la prestigiosa Casa Comte”, agregó la publicación de la agencia. Tras la reforma recibió prestigiosas visitas de todo el mundo. Luego de su muerte en 1977, lo heredaron sus hijos. Uno era muy amigo de Hugo Anzorreguy y lo dejó a su cuidado, por eso siempre había personal de la SIDE. Así fue como llegó Carlos Menem, quién organizó grandes fiestas.
En el 2006, los herederos de Fritz Mandl concesionaron la propiedad que pasó a ser un hotel boutique bautizado El castillo de Mandl. El hotel aún funciona y no tiene teléfonos para comunicarse, todo es por mail. Desde la Secretaría de Turismo local confirmaron a BAE Negocios que funciona. Los vecinos reconocen que abre a veces y en sus páginas no hay tarifas, pero si una estricta aclaración: no aceptan niños menores de 12 años.
Todo lo que rodea al Castillo Mandl genera curiosidad y tiene un halo de misterio.