El presidente Alberto Fernández encabezó la delegación argentina que dio los primeros saludos protocolares al flamante mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da SIlva, en el Salón Noble del Palacio del Planalto, la Casa de Gobierno de Brasil.

Fernández saludó a Lula después del mandatario portugués, Marcelo Rebelo de Souza, conforme la organización del ceremonial presidencial brasileño.

El saludo entre Alberto Fernández y Lula da Silva

El presidente de Argentina estuvo acompañado en el saludo protocolar por el canciller Santiago Cafiero y el embajador en Brasilia, Daniel Scioli.

La delegación argentina, además de a Lula, realizó el saludo protocolar a la primera dama, Rosángela Da Silva, al vicepresidente Geraldo Alckmin y a la esposa de este, Lu Alckmin, antes de participar de la cena de honor que prepara el Palacio de Itamaraty para los visitantes extranjeros.

Lula y Fernández mantendrán el lunes una reunión bilateral en el Palacio de Itamaraty, toda vez que el brasileño prometió viajar a Argentina el 24 de enero a la cumbre de la Celac que se realizará en Buenos Aires, donde pretende también realizar una visita de Estado.

"Mañana va a realizarse una reunión breve entre Lula y Alberto Fernández", dijo Cafiero en la embajada argentina en Brasil, informó la Cancillería.

Lula asumió su tercera presidencia

Lula da Silva, aseguró al asumir su tercer mandato que su gestión deberá "reconstruir el país" tras el "proceso de destrucción nacional" que ejecutó su antecesor, Jair Bolsonaro, defendió a la democracia como la gran victoriosa en las elecciones e hizo un diagnóstico "aterrador" sobre la herencia recibida en términos de políticas públicas.

En su discurso de investidura, Lula enfatizó que su prioridad en política externa será Latinoamérica, el Mercosur, la Unasur, los Brics y una relación "activa y altiva" con sus principales socios comerciales extrarregionales, como China, Estados Unidos y la Unión Europea.